La tienda PCF situada en Canfranc (Huesca) presenta un diseño organizado en torno a un esquema de estanterías modulares que cubren las paredes, dedicando áreas específicas para categorías de productos como alcoholes premium y perfumes de marcas reconocidas. La disposición aprovecha la verticalidad de los muros para maximizar el espacio de exhibición y agrupar los productos de manera lógica y accesible, facilitando una experiencia de compra clara y ordenada para los clientes.

En el centro del espacio, un módulo circular destaca ciertos artículos, atrayendo la atención y creando un punto focal dentro de la tienda. La iluminación general, proveniente de paneles en el techo, genera una luz suave y uniforme que permite una visualización clara de los productos. Las secciones están etiquetadas directamente sobre las estanterías, ayudando a los visitantes a orientarse rápidamente y encontrar productos específicos con facilidad. La distribución y el diseño funcional responden a las necesidades de un entorno comercial eficiente, optimizando tanto el flujo de clientes como la accesibilidad de los productos.